Domingo de Resurrección: Expectativas incumplidas por el mal tiempo

La lluvia se ha convertido en la inesperada protagonista de este Domingo de Resurrección, impidiendo la salida procesional de la Hermandad del Resucitado, la cual hubiese puesto el broche final a una Semana Santa marcada por cancelaciones y adaptaciones. La decisión, tomada en una reunión de última hora de la Junta de Gobierno de la hermandad, ha dejado un vacío en las calles de la ciudad y en los corazones de los fieles y devotos.

Desde temprano, la esperanza se mezclaba con la incertidumbre bajo un cielo encapotado que prometía mejorar, pero que al final no dio tregua. La hermandad, que tenía previsto iniciar su recorrido a las 10:00 horas desde la Hispanidad, se vio obligada a cancelar su estación de penitencia debido a las persistentes lluvias que, lejos de cesar, continuaron hasta más allá de la hora de salida programada.

Este año, la Hermandad de la Sagrada Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo y María Santísima de la Luz, con un cortejo de aproximadamente 60 penitentes, esperaba recorrer las calles de su feligresía con la A.M. Santa Cruz de Huelva aportando las notas musicales a un día que debía estar lleno de luz y color. Un exorno floral en tonos blancos y la tradicional visita a la residencia Santa Teresa de Jornet eran algunos de los momentos más esperados y simbólicos del recorrido que, lamentablemente, este año no pudo ser.

La ciudad, que se había preparado para vivir intensamente el último día de su Semana Grande, se encuentra ahora reflexionando sobre una celebración que se ha visto truncada, no solo hoy sino en varios momentos a lo largo de la semana, por un clima adverso. A pesar de la preparación y el esfuerzo de todas las hermandades, este año, Huelva ha experimentado una de las Semanas Santas más breves y atípicas que se recuerdan, sin poder disfrutar plenamente de sus tradicionales estampas de pasión y devoción.

El Ayuntamiento de Huelva, en un gesto de solidaridad y apoyo, realizó una ofrenda floral en la Parroquia de Nuestra Señora del Pilar, acompañando a los hermanos de la cofradía en este momento de tristeza y recogimiento. Este acto simbólico refleja el sentir de una comunidad que, a pesar de las circunstancias, mantiene viva su fe y su esperanza en la resurrección, no solo la de Cristo, sino la de sus propias tradiciones el próximo año.

En un momento de reflexión y mirada hacia el futuro, los onubenses ya piensan en la próxima Semana Santa, con el deseo de que las calles de Huelva se llenen nuevamente de música, color y alegría, y que la Hermandad del Resucitado pueda, finalmente, recorrer su itinerario completo, marcando el verdadero final de una Semana Santa plena y vivida en su totalidad.